LEHNDORFF Y ALLEGRETTA, NUESTRAS POTRANCAS DE OTOÑO, TEMPESTI Y LOS JAPONESES, JUSTIFY TRANSATLÁNTICO

 - La elegante acción, la cabeza gacha formando casi una línea recta con el cuello, y el fluido y a la  vez brutal cambio de ritmo a 400 metros de la meta de Longchamp llevaron a Ace Impact a la victoria en el último Prix de l’Arc de Triomphe G1. El potro castaño de Rouget firmaba su sexta victoria en otras tantas salidas y sellaba, según se supo poco después, su vida deportiva. También ponía un toque germánico, como tantas veces últimamente, en el palmarés de la gran carrera; porque, aunque nacido en Irlanda y entrenado en Francia, alemanas son Waltraut Spanner, su criadora, y Barbara Moser, copropietaria del Haras de Long Champ, yeguada donde el hijo de Cracksman pasó sus días antes de ser subastado cuando era un yearling. Y en Alemania comenzó, hace casi 200 años, uno de los capítulos más relevantes, y quizá el más influyente, de la aún corta biografía de este animal, que en 2024 empieza a ejercer como semental en el Haras de Beaumont al precio de 40.000 euros.

- Con 16 años de edad, el conde Georg Hermann Albrecht von Lehndorff se alistó en el regimiento de Coraceros nº 3 en Königsberg (entonces capital de Prusia Oriental, hoy Kaliningrado). Terminaba el año 1850 y Prusia movilizaba sus tropas contra Austría. La predilección del joven Georg por la caballería no era casual. Había pasado parte de su infancia en la yeguada de su familia, donde se criaban purasangres, y allí desarrolló la pasión por los caballos en general, y por los de carreras en particular, que impregnaría toda su vida y le convertiría en un muy relevante personaje de la historia de la cría del PSI en Alemania y en el mundo. Su tiempo en filas duró hasta 1855 y en ese periodo ya obtuvo sus primeras victorias como jinete amateur. Dejó el ejército para hacerse cargo, a la muerte de su padre, de una yeguada propiedad de este situada cerca de la citada Königsberg que en 1860 vendió para adquirir otra próxima a Spandau donde, junto a su hermano, creó una cuadra de carreras y una operación de cría. Siguió montando en los hipódromos hasta 1863 y fue campeón de jinetes aficionados en seis ocasiones. Tenía caballos en entrenamiento en la propia Prusia, Rusia y Francia, y, según puede leerse en la página web Thoroughbred Heritage en un mismo año ganó el Gran Premio de Niza montando a Faustine y el Gran Premio de St. Petersburgo a lomos de Gaspard. En 1866 vuelve a filas ante un nuevo conflicto con Austria, pero no está mucho tiempo en el frente: ese mismo año en nombrado máximo responsable de la yeguada imperial de Graditz, cargo que conservó hasta 1911 y al que añadió, en la década de los 1880, el de jefe del servicio de cría caballar del recientemente creado estado alemán.

- La misión fundamental de Lehndorff en esos puestos era proveer de animales para la remonta de la caballería y la artillería de su país, pero supo combinar ese deber con su pasión por el caballo de carreras. Concentró el Graditz todo el ganado PSI propiedad del Estado y convirtió la yeguada en cuna de los mejores corredores de Alemania. Los colores negros y blancos a rayas con gorra negra del Königliches Hauptgestüt Graditz llegaron a tal punto de dominación que el resto de criadores y propietarios del país solicitaron al Union Klub (Jockey Club germano) que instituyese carreras en las que los caballos criados en la yeguada estatal no pudieran correr. El afán de Lehndorff por mejorar la cabaña germana le llevó, ya desde la década de 1850, a acudir periódicamente a las ventas de Newmarket con vistas a la adquisición de ejemplares, Primero lo hizo a título particular y después, en calidad de comisionado gubernamental. La constante acumulación de experiencia lo convirtió en una autoridad en todo lo concerniente al caballo de carreras. Su parecer era apreciado incluso por los británicos y fue nombrado miembro honorario del Jockey Club. El gran entrenador Mathew Dawson, que ensilló a los ganadores de 28 clásicas y tuvo a su cargo al imbatido y legendario St. Simon, dijo que no había persona cuyo criterio sobre los caballos de carreras le mereciera más confianza que Lehndorff. El conde recogió sus ideas hipológicas en el libro Manual para criadores de caballos, publicado en 1881. En él expresaba su famosa máxima de que las tres principales cualidades del purasangre eran “primero, dureza; segundo, dureza, y tercero, dureza”. (Es muy probable que, a la hora de hacer esa afirmación, el conde se viera influenciado por los criterios que imponía la cría del buen caballo de armas, al que tantos afanes dedicó a lo largo de su vida; porque parece evidente que un caballo destinado a correr en los hipódromos ha de tener una constitución que le permita resistir el esfuerzo, pero se puede convenir en que, aparte de eso, la clase y la velocidad son al menos tan importantes).

- Uno de los ejemplares que Lehndorff adquirió en sus expediciones a Newmarket fue Alveole, yegua de vientre comprada en 1894. Nacida cinco años antes, era hija de Crafton (por Kisber, el potro húngaro que ganó el Derby de 1876) y descendiente por línea femenina de Maid of Masham, una de las yeguas de cría más influyentes del Stud Book británico en el siglo XIX. Una vez en suelo alemán, Alveole pasó vía subasta a manos del Gestút Romehof, la yeguada que, cerca de Colonia, acababa de fundar Gerson von Bleichröder, el banquero que financió las políticas del canciller Otto von Bismarck. La hija de Crafton habría de convertirse en una de las yeguas más importantes de la historia de la cría germana del PSI y su gran y benéfica influencia se empezó a expandir ya con su primer producto en su país de adopción: Bayreuth, una hija del muy buen corredor inglés The Bard que a su vez dio en 1903 a Ibidem, producto de Little Duck, un ganador del Prix du Jockey Club, derby francés. Ibidem ganó para Von Bleichröder el Preis der Diana, Oaks germano, en su edición de 1906 Al año siguiente, la yegua fue adquirida por el Gestüt Schlenderhan, yeguada cercana a Romerhof y fundada asimismo por otro gran banquero, Eduard von Oppenheim, en 1869.

- Para los colores rojos, azules y negros de Schlenderhan -considerada hoy, y desde hace décadas, institución señera del turf mundial- Ibidem fue una productiva criadora. Engendró entre otros a Ariel (Ard Patrick), ganador del Deutsches Derby, y originó una línea femenina que dio otros ganadores clásicos en el país germano. Su  hija Arabis, propia hermana de Ariel, dio entre otros a Alba (Wallenstein), otro ganador del derby alemán, y a su propia hermana Arkebuse, buena ganadora y abuela por línea materna de la castaña oscura Asterblute, ganadora para Schlenderhan del Deutsches Derby, el Preis der Diana y el Schwarzgold Rennen (1000 Guineas) entre las seis victorias que la consagraron como brillante líder de la generación clásica alemana de 1946. Asterblute era hija del Pharis, el gran campeón de Marcel Boussac que los nazis habían confiscado en 1941 e instalado como semental en la yeguada de Altefeld, donde permaneció hasta el final de la guerra. “Fue justicia poética”, escribió Peter Willett en su libro Makers of the modern thoroughbred, “que Pharis odiara la altitud y el duro clima de la yeguada alemana. Nunca prosperó y solo produjo un animal de gran clase, la potranca Asterblute, en las cinco temporadas en que sirvió allí. Fue reintegrado a Francia en mayo de 1945 y vivió doce años más, en los que demostró una calidad como semental a la altura de su brillantez en la pista”.

- En España la sangre de Pharis tuvo sus mejores representantes en dos yeguas de cría, Montaria, adquirida por Ramón Beamonte como parte del lote de yeguas fundacionales de su operación ganadera, y Pharinande, del Conde de Villapadierna primero y de Lore Toki después. Montaria produjo cinco ganadores para los colores blanquiverdes, entre ellos, Whirly, por Whirlaway, ganador del Gran Premio de San Sebastián; Menara, por Migoli, ganadora del Premio Villamejor, y Mansour, por Fervent, ganador del Gran Premio Nacional. Pharinande, por su parte, puso en pista nada menos que once ganadores, entre los cuales Guaraní (Cocoliche) e ithaca (Primesautier), laureadas ambas en el Beamonte, y Haiti (Nertal), vencedor en el Gran Criterium). Su hija Pharadiba (Sicambre), dio a su vez a La Scandalossa (Vamos), ganadora del Valderas y, como sus dos tías, del Beamonte.

- Asterblute no reprodujo en la yeguada su éxito en las pistas, pero mantuvo viva en Schlenderhan su rama de la línea de Alveole a través de su hija Alameda (Magnat), su nieta Almyra (Birkhahn) y su bisnieta Anatevka (Espresso), esta última una útil ganadora de cuatro carreras y colocada de listed que en la yeguada produjo diez ganadores, algunos de ellos de cierta categoría; entre ellos destacaron Anno (Lombard), vencedor en el Deutsches St. Leger G2, y, sobre todo, su propia hermana Allegretta. Esta alazana fue el primer producto de la línea femenina nacido en Inglaterra desde que su ancestro Alveole abandonara las islas casi un siglo antes tras ser comprada por Lehndorff; y fue también protagonista del espectacular remate de Ace Impact en el Arco, pues aparece dos veces (5 x 4) en el pedigree del potro: un hito que no hace sino apuntalar el rango de esta yegua como estrella en la cría del PSI clásico contemporáneo. Los responsables de Schlenderhan la dejaron en tierras inglesas, donde la entrenó Michael Stoute y consiguió ganar dos carreras de 9 salidas a la pista y colocarse en el Oaks Trial Stakes G3. Su pedigree era completamente ajeno a la moda, pero estaba lleno de calidad, de fondo y de la dureza que tanto ponderaba Lenhdorff. Muestra de ello pueden ser su padre, Lombard, ganador de veinte de sus 28 carreras, entre ellas el St. Leger germano y tres ediciones de Preis Von Europa G1, y dos veces Caballo del Año en Alemania, y su abuelo materno, Espresso, que acumuló diez victorias, entre ellas el Grosser Preis von Baden, en sus treinta salidas a la pista. En las primeras generaciones del pedigree de Allegretta destacan las duplicaciones sobre Aster, la madre de Asterblute (4 x 5), el triple coronado Bahram (5 x 4), el muy influyente Hyperion (5 x 5) y la gloria de la cría alemana Alchimist, descendiente también por línea femenina de Alveole, que aparece 4 x 4. 

- Al final de su temporada clásica, Allegretta fue subastada en Tattersalls y adquirida por la operación de cría estadounidense Big E. Se quedó vacía de su primera cubrición y fue devuelta el entrenamiento, sin éxito. Volvió a no concebir en su segundo acoplamiento y tras quedarse llena de Irish Castle en el tercero, sus propietarios decidieron rentabilizarla y la inscribieron en las ventas de Keeneland, donde Roger Nataf, de la agencia Horse France, la remató en 55.000 dólares para Michel Henochsberg, Maurice Legasse y Marc de Chamburé, que operaban en el mercado del PSI con las marcas Marystead y M3 Elevage. Fue Henochsberg el que se sintió atraído por la yegua, de la que dijo en su día al explicar las razones de la compra: “Había sido una corredora útil que parecía no tener mucho corazón, pero provenía de una familia excepcional. Fui a verla y no era elegante, pero tenía un físico excepcional. Me sedujo”. Cambio de dueños y cambio de resultados para Allegretta, que a partir de entonces dio, entre otros, a King’s Best, ganador de las 2.000 Guineas G1 y semental de cierto éxito, y a las dos hembras que aparecen en el pedigree de Ace Impact: Urban Sea (Miswaki), ganadora asimismo del Arco y madre de dos gigantes de las pistas y la yeguada: Galileo y Sea The Stars, y Allez Les Trois (Riverman), vencedora en el Prix de Flore G3.

Ace Impact gana el Prix de l'Arc de Triomphe G1 (Foto: P. Chapa).

- Urban Sea está en el pedigree del ganador del Arco 2023 justamente a través de Galileo, padre del gran Frankel, cuyo hijo Cracksman es el progenitor del ya ex pupilo de Rouget. Allez Les Trois es la madre de Anabaa Blue, ganador del Prix Du Jockey Club G1, derby francés, y abuelo materno de Ace Impact. Este es, con diferencia, el mejor producto que hasta ahora ha dado Cracksman, cuádruple ganador de G1 -destaca en su trayectoria el doble triunfo en el Champion Stakes G1- y actualmente semental en el Dalham Hall Stud, donde su cubrición para 2024 se anuncia en unas discretas 17.500 libras; aparte del ganador del Arco, entre su progenie solo destaca Aloa, ganadora en Italia del Premio Dormello G2. En España hemos visto a los útiles Mandalorian, Grazalema y Petra. Frankel deslumbró en las pistas -imbatido en catorce carreras y considerado como uno de los mejores PSIs de la historia- y está haciendo lo mismo en la yeguada. El Prix de L’Arc de Triomphe 2023 fue prueba de ello: por detrás de su nieto Ace Impact completaron el trío sus hijos Onesto y Westover. En 2022, la carrera fue ganada por su hija Alpinista. El coloso criado por Khalid Abdullah ha ganado este año su segunda estadística de sementales en Gran Bretaña e Irlanda con 191 corredores, 87 ganadores, 124 victorias, 23 ganadores de stakes y más de 7 millones de libras en premios, casi 3 millones por encima del segundo clasificado, Dark Angel. En el conjunto del continente europeo, las ganancias de su progenie en 2023 fueron de 10,8 millones de libras, cifra que supera en más de 4 millones a las de su inmediato seguidor, Siyouni.

- Frankel hace la monta desde su retirada de las pistas en el Banstead Manor Stud y su tarifa de cubrición para 2024 se ha fijado en 350.000 libras. En 2023 el caballo produjo 11 ganadores de G1 y un total de 42 ganadores de stakes; entre ellos hay que mencionar, por sus vínculos locales, a la alazana Maxux, propiedad de Álvaro Odriozola y ganadora de G3 en septiembre, y a Kelina, entrenada por Carlos Laffón para Wertheimer y ganadora del Prix de la Fôret G1 en el meeting del Arco.  Aquí hemos visto a nueve hijos de Frankel, de los que Atty Persse, Master of Reality, Amtiyaz, Stour y Corps de Pages han dado un cierto valor. Otro de sus productos, First Eleven, medio hermano del campeón Kingman, hizo sus primeras armas como semental en 2020 en la Yeguada Torre Duero. Esta temporada han corrido sus primeros productos, que no parecen especialmente precoces, y cuenta con dos ganadores, Juanillo y Habanero, de nueve ejemplares en pista. En 2024 hará la monta en el Haras de la Barelière.

- La madre de Ace Impact, Absolutly Me, ganó dos carreras y se colocó en listed en Francia y Alemania. Procede de una línea femenina ilustre que estuvo a punto de no existir. En 1908, el estadounidense William Chanler estaba buscando una yeguada para criar en suelo francés, y así conoció a Jean Couturié, propietario de Le Mesnil, propiedad dedicada a la explotación agrícola y de ganado bovino. Couturié era jinete aficionado, pero nunca había criado caballos en serio en su finca. Chanler le dijo que, si el terreno servía para que la leche de las vacas fuera de calidad, igualmente sería válido para criar buenos caballos de carreras. Y así empezó la historia del Haras du Mesnil, una de las más importantes yeguadas francesas del siglo XX. Simper fue una de las yeguas que Chanler instaló allí al principio de su aventura como criador y propietario en Francia. En 1910 la yegua dio una potranca, Grignouse, que, a su vez, ocho años más tarde, produjo una hembra hija de Helicon, semental importado de Inglaterra que hacía la monta en las cercanías. La potranca tenía una extremidad deforme y Chanler ordenó que fuera sacrificada. Pero a Couturié le gustaba mucho y le pidió al americano que le perdonara la vida y se la vendiera. Chanler aceptó, pero rehúso aceptar pago alguno por un animal que consideraba sin valor. Así se salvó La Grelée, nombre que se dio a la potranca y con el que se convirtió en yegua base de Le Mesnil.

- En 1918, el mismo año en que nació La Grelée, Lord Derby fue nombrado embajador británico en Francia y muy pronto decidió que la importante actividad que como criador y propietario desarrollaba en su país debía tener una sucursal en suelo galo. Eligió Le Mesnil como alojamiento para su operación de cría allí y así se fraguó una estrecha relación entre las familias Couturié y Stanley (apellido de los marqueses de Derby). Como fruto de ese vínculo, en 1950, dos años después de fallecido el ex embajador (y además destacado político conservador y el más influyente criador de caballos de carreras del siglo XX), su nieto llegó a un acuerdo con Elisabeth Couturié (viuda de Jean, que había fallecido poco antes) para intercambiar sendas yeguas de cría. Así llego a los boxes de los Stanley una nieta de La Grelée llamada Gradisca. Cruzada con el gran fondista y muy buen semental Alycidon, la francesa dio a Samanda, que perdió la vista de foal por un accidente, pero fue salvada para la cría. Entre sus productos, a los que nada más nacer se colgaba una campanilla para que su madre los localizara, estuvo Ouija (Silly Season), que produjo tres animales muy notables: el castrado Teleprompter, popular competidor que entre cuyas once victorias está el Arlington Million G1; su propia hermana Selection Board, a su vez madre de la sensacional Ouija Board (Cape Cross), ganadora de 10 carreras en tres continentes, entre las cuales el Oaks Stakes G1 y dos ediciones de la  Breeders' Cup Filly & Mare Turf G1; y Rosia Bay (High Top), ganadora,  madre de dos ganadores de G1: Ibn Bey y Roseate Tern, y tatarabuela de Ace Impact. Aparte de la doble presencia de Allegretta y la selecta línea femenina, en el origen del ganador del Arco destaca la triple aparición de Danzig a través de tres hijos distintos: Danehill, Green Desert y Anabaa. Otro de los productos de Samanda fue Malmaison, una hija del Derby winner Royal Palace de la que aquí vimos a su basto y potente hijo Toba (Soughaan), ganador de catorce carreras desde 1991 a 1999, entre ellas Villapadierna, Villamejor, Corpa, Gran Premio de San Sebastián (dos veces) y Gladiateur.   

- War of Dance venia siendo la más lujosa perdedora del año después de colocarse sucesivamente en el Valderas, el Beamonte y el Ricardo Ruiz Benítez de Lugo, pero eligió el mejor día para ganar y se apuntó por corta cabeza el Premio Memorial Duque de Toledo. La bonita y bien desarrollada castaña de Peques es la tercera potranca de 3 años que gana en el presente siglo la importante carrera en recuerdo de Alfonso XIII: las anteriores fueron You Or No One (Falbrav) ganadora en 2009, y Tarantela (Camelot), laureada en 2017. La carrera, antes Gran Premio de Otoño y un año Premio Albano, tomó su actual denominación en 1941 y la primera hembra que ganó el Memorial en su edad clásica fue la irlandesa Mallorca, vencedora en 1945 para los colores rojos y azul marino a franjas de Luisa María Narváez, Duquesa de Valencia, a la que cabe suponer que el triunfo hizo especial ilusión, pues era una muy combativa activista monárquica. Entrenaba a la yegua Francisco Cadenas y en el Memorial la montó Enrique Romera.   

War of Dance, en primer término, gana el Memorial (Foto: Rafael Lorente)

- War of Dance, riada en Irlanda  fue adquirida en una venta breeze up de Tattersalls por su preparador, Guillermo Arizcorreta, que pagó por ella 62,000 guineas. Su origen comparte tres significativos nombres, Galileo, Green Desert y Riverman, con el de Ace Impact. Galileo, bisabuelo paterno del ganador del Arco, es el abuelo materno de la vencedora en el Memorial a través de la no corredora Granny Bea, madre de otros tres ganadores y cuya línea femenina ha producido en las primeras generaciones a ganadores de grupo como Gutaifan, Maraheel y Ventura Storm, entre otros. El padre de War of Dance es Muhaarar, excelente velocista criado por Hamdan Al Maktoum y defensor de sus conocidos colores azul real y blanco, para los que en 2015, siendo 3 años, ganó cuatro carreras de G1 sobre las distancias más breves. Fue retirado a la cría en Inglaterra y no respondió a las expectativas, aunque estas quizá se cifraban en la producción de escuadrones de velocistas precoces y fácilmente vendibles y lo que da el caballo, respondiendo más a su origen materno que paterno, son animales que rinden bien sobre distancias medias y clásicas. El caso es que en 2022 este bonito castaño fue enviado al Haras des Faunes, en el sur de Francia, desde donde, para la temporada de monta 2024, ha sido trasladado al más importante Haras de Petit Tellier (Normandía), en donde su tarifa de cubrición será de 14.000 euros. La mudanza está, con toda probabilidad, relacionada con la buena recepción que los criadores franceses le han dado al caballo -en 2023 cubrió en Faunes 124 yeguas al precio de 7.500 euros- y con el hecho de que en el pasado año Muhaarar produjo su mejor vástago hasta ahora, Marhaba Ya Sanafi, ganador de la Poule d’Essai des Poulains G1 (y cuya madre, como la de War of Dance, es una no corredora hija de Galileo).  Además de este ganador clásico, Muhaarar ha dado otros once ganadores de grupo, entre los que se puede destacar a Eshaada, primera en el British Champions Fillies & Mares Stakes G1 de 2021 y, por cierto, descendiente de Allegretta por línea femenina. Con la victoria de War of Dance en el Memorial Duque de Toledo, la línea masculina de Green Desert se anotó el triunfo en las tres grandes pruebas intergeneracionales de nuestro calendario después de que El Caney ganara el Gran Premio de Madrid e Il Decamerone, la Copa de Oro.

- Tres semanas después de su victoria, War of Dance volvió a la pista para disputar el Premio Román Martín, en el que fue segunda por detrás de la espléndida nacional Safaga, con lo que ambas yeguas repitieron la gemela que ya habían protagonizado del Premio Beamonte y dieron una muestra más de la calidad y consistencia que acreditaron a lo largo de la temporada. Safaga está criada por la Cuadra Becares y defiende en las pistas los colores azules de la asociación entre sus criadores y la Cuadra Toledana. Es hija de Duckmore Bay, una yegua de cría que tanto desde Irlanda como una vez importada nos ha dado bastante, pues es la madre de El Incendio (Clodovil), ganador de tres carreras; Fortun (Bachelor’s Duke), que se apuntó el Premio Villapadierna y el Duque de Alburquerque, y Cefiro (asimismo por Clodovil), admirable competidor y millero de buen nivel que corrió 39 veces, ganó once y se colocó otras tantas; su victoria más importante llegó en el Premio de la Hispanidad de 2018 montado por su jinete habitual, José Luis Martínez. A estos tres caballos los entrenó Juan Luis Maroto, y Fortun y Cefiro defendieron la chaquetilla negra de Toledana, copropietaria de Safaga, a la que entrena Christian Delcher.

Safaga (Foto: P. Chapa).

-Duckmore Bay no corrió y entre su producción, aparte de la vista aquí, hay dos ganadores más: uno de ellos Inaam (Camacho), ha ganado un total de 12 carreras en Inglaterra (la última, el pasado mes de marzo) entre los 2 y los 10 años. La yegua es hija de Titus Livius, un buen sprinter de la familia Niarchos que no dio bien como semental, y procede de una línea femenina estadounidense que en las últimas décadas no ha generado nada relevante. En el pedigree de Safaga llama la atención, y seguramente influye en la calidad de la yegua, el inbreeding 4 x 5 sobre Machiavellian  a través de una hija y un hijo. Machaivellian, criado por los Niarchos como su hijo Titus Livius, fue un excelente 2 años en Francia y después sirvió con éxito como semental en el Dalham Hall Stud.

Duckmore Bay (Foto cedida por Rafael Rojano).

- La yegua de Becares y Toledana es producto de la última potrada de Lightning Moon, el hijo de Shamardal que importó Torre Duero para hacer la monta en nuestro país y lamentablemente (muy lamentablemente, a la vista de los resultados) murió en 2020, víctima de laminitis, y a la temprana edad de 9 años, después de engendrar solo tres potradas. El caballo, un castaño bastante atractivo, consiguió su victoria más importante en un G3 sobre 1.200 metros disputado en Ascot y después fue adquirido por Godolphin, cuadra para la que no llegó a ganar.  En 2023 lideró la estadística española de sementales por tercer año consecutivo: según las cifras de Gaceta Hipódromo, dio 11 ganadores de 21 carreras y su progenie ha acumulado en nuestro país unas ganancias de 310.450, mayores que las que le dieron el liderazgo en 2021 y 2022. Aparte de Safaga, sus mejores productos han sido Pamplona, ganador del Villamejor y del Nacional, y la buena y refinada millera Upa Lola. Las victorias de Safaga en el Beamonte y Pamplona en el Villamejor hacen que Lightning Moon haya producido dos ganadores clásicos en España en un mismo año. La circunstancia se había dado por última vez en cuando el gran padrillo internacional Lope de Vega (hijo asimismo de Shamardal, casualmente) ganó el Cimera con Rodaballo y el Beamonte con Navia. El último reproductor afincado en nuestro país que firmó este logro del doble triunfo clásico en un año es Caradak, que en 2013 tuvo a Karetas, que ganó el Cimera, y a Navarra, vencedora en el Beamonte.  La primera vez que se produjo este doble éxito desde que en 1961 se creó el Premio Valderas y nuestro turf pasó a contar con las, digamos así, cinco clásicas canónicas (con la importante salvedad de que, por entonces, las poules estaban reservadas a productos nacionales), ese doble éxito de un semental se produjo por primera vez en 1965, cuando Goyaz, el muy buen reproductor de Lore Toki, padreó a Dalia, que ganó el Valderas para la cuadra La Rubita, y a Damasco, que se impuso en el Villapadierna para Esperanza. Ambos animales habían sido criados, justamente, en Lore Toki y sus entrenadores respectivos eran Carlos Díez y Fernando Gazapo.

-Shamardal, el padre de Lightning Moon, ha sido uno de los purasangres más importantes de Europa en lo que va de siglo. En las pistas ganó seis de sus siete carreras y sus victorias incluyeron el Dewhurst Stakes G1, la Poule d'Essai des Poulains G1, l Prix du Jockey Club G1 (batiendo a Hurricane Run luego ganador del Prix de l’Arc de Triomphe) y el St. James's Palace Stakes G1. Ejerció como semental en el Kildangan Stud y dio 75 ganadores de grupo, de los que 25 ganaron carreras de G1. También es el padre de Lope de Vega, al que se aludía antes, y de Dariyan, cuya hija Princess Child ganó en Madrid el Gran Criterium y después fue segunda en un listed en Francia. Uno de los más grandes corredores que dio Shamardal es el velocista Blue Point, ganador de 11 carreras y autor de dos logros relevantes: es el único caballo de la historia que ha ganado tres sprints de G1 en Royal Ascot y en 2018, a sus 5 años, completó en el meeting real el doblete  King's Stand Stakes G1 y Diamond Jubilee Stakes G1 con cuatro días de intervalo entre una y otra carrera. En 2023 han corrido sus primeros productos, que le han proporcionado un espléndido debut como padrillo. El caballo ha encabezado las estadística de sementales debutantes en Gran Bretaña e Irlanda con nada menos que 41 ganadores de 57 carreras y además ha sido el primer caballo en dar dos ganadores de G1 a 2 años en su primera potrada desde que el sensacional Sadler’s Wells lo hiciera en 1988; en el caso de Blue Point, estos dos ganadores son Rosallion, que ganó el  Prix Jean-Luc Lagardère G1, la más importante carrera francesa para la generación precoz (esta inadecuada pero bonita expresión que usamos en España para referirnos a los 2 años) y Big Evs, ganador de la  Breeders' Cup Juvenile Turf Sprint G1. Blue Point tiene un atractivo y corpulento  físico muy similar al de Shamardal -incluida su cabeza acarnerada- y hace la monta en el Kildangan Stud, el depósito de sementales de Darley en Irlanda (Dalham Hall, al que hemos aludido ya varias veces, es su homólogo en Newmarket); para 2024, su cubrición cuesta 60.000 euros. Shamardal esta representado en la actual cabaña de sementales española por su hijo Bow Creek, un ganador de G2 en Inglaterra y Australia que hace la monta en la Yeguada Agrado.

- El mejor hijo de Sadler’s Wells no nació en su primera potrada, sino en la duodécima, pero la espera mereció la pena pues se trata de Galileo, que, aunque murió en 2021, sigue hollando el turf mundial con pies e influencia de gigante. Doce veces líder de la estadística de sementales en las Islas Británicas y padre por ahora de 99 ganadores de G1, en nuestro país ha sido noticia en 2023 no solo como abuelo materno de War of Dance sino también porque en las últimas semanas del año se conoció la llegada a nuestro país, para ejercer funciones de semental en Dehesa Milagro, de su hijo Ruler of the World. Este robusto alazán careto es uno de los cinco ganadores del Derby que engendró su padre y el hecho de que por primera vez haya llegado a nuestro país un laureado de la carrera más importante del mundo es, ya de por sí, una de las noticias más relevantes de la historia de las carreras de caballos y la cría del PSI en España. Ruler of the World, al que entrenó Aidan O’Brien, ganó el Derby  de 2013 montado por Ryan Moore, que portaba los colores azul oscuro de Sue Magnier, una de las tres chaquetillas con las que corren los caballos del consorcio Coolmore; después, el alazán pasó a manos de Al Shaqab Racing, para quien a 4 años ganó el Prix Foy.  Antes de llegar aquí hizo la monta en Irlanda, Francia e Italia, sin excesivo éxito pero a la vez sin demasiado apoyo. Aún así, el caballo ha dado dos ganadoras de G1: Iridessa, que ganó cuatro carreras de la máxima categoría, entre ellas la Breeders' Cup Filly & Mare Turf, para los colores rojigualdos de la propietaria española Chantal Regalado, y La Petite Coco. En España tuvimos hace poco a la muy buena nacional Maracay, ganadora del Valderas y el Beamonte y doble colocada de listed en Francia. El nuevo semental de Milagro, donde hará la monta este año junto a Noozhoh Canarias y Plantagenet, es medio hermano del campeón Duke of Marmalade y su pedigree luce una bonita combinación en la que destacan duplicaciones de casi todos los sospechosos habituales: Northern Dancer (5 x 4), Mr. Prospector (4 x 3), Native Dancer (5 x 5 x 5), Special (4 x 5) y Buckpasser (4 x 5). La línea femenina es la americana de Missy Baba, a la que pertenecen grandes como A.P. Indy. Lemon Drop Kid, Summer Squall y Gay Mecene. Ruler of the World es el segundo ganador de una clásica inglesa que viene a hacer la monta a España. El primero fue Bolkonski, que ganó las 2.000 Guineas G1 de 1975 montado por Gianfranco Dettori, padre de Frankie Dettori. El caballo llegó a la gaditana Yeguada El Bosque en 1989, pero no pasó nada.

- La sangre de Galileo también pasó en primer lugar la meta del Derby de 2023. El descendiente de Allegretta aparece como abuelo materno en el pedigree del ganador, Auguste Rodin, también entrenado por O’Brien, también montado por Moore y también propiedad de Coolmore, aunque este caballo defiende las sedas azules y naranjas de Michael Tabor, otro de los chicos, como  llama Aidan O’Brien a los miembros del consorcio. El atlético castaño oscuro ganó después el Irish Derby G1, corrió mal en el King George VI & Queen Elizabeth Stakes G1 y se redimió en otoño triunfando en el Irish Champion Stakes G1 y en la Breeders’ Cup Turf G1, en este última gracias no solo a su clase sino a que Ryan Moore le hizo una de las montas del año. Auguste R. es miembro de la última y corta potrada del gran campeón y semental japonés Deep Impact, y sobre él, que porta en su pedigree  las dos grandes líneas masculinas clásicas de los últimos 20 años (es decir, Sadler’s Wells-Galileo y Sunday Silence-Deep Impact), tiene concentradas Coolmore grandes esperanzas de encontrar a su próximo semental estelar. El cruce Deep Impact y madre por Galileo ya había dado dos ganadores clásicos europeos: Saxon Warrior, ganador de las 2.000 Guineas en 2018 (y que no está respondiendo a las expectativas como semental) u la tristemente malograda Snowfall, primera en el Oaks y el Irish Oaks G1 de 2021.

- Estos días se ha podido ver en redes sociales un bonito vídeo de Wind in her Hair botándose y galopando un poco, a sus venerables 33 años de edad, sobre la nieve que cubría su paddock. Esta hija de Alzao (Lyphard) obtuvo la más importante victoria de su carrera en la Aral-Pokal G1, carrera que actualmente se disputa con el nombre de Grosser Preis von Bayern, que Alpinista ganó en 2021 y que cuenta entre sus más ilustres ganadores con el campeón germano Athenagoras , que la ganó en 1973 y 1974 y que, como Allegretta, desciende por línea femenina de Alveole a través de Bayreuth. Wind in her Hair fue exportada como yegua de vientre a Japón en 1999 y allí se ha ganado la inmortalidad como madre de Deep Impact, que nació en 2002. Un año antes, y producto asimismo de un cruce con el gran Sunday Silence, la yegua había dado a Black Tide, que no llegó ni mucho menos al gran nivel de su hermano menor, pero al que un triunfo en G2 le valió el pase a la yeguada. Allí su mejor producto fue Kitasan Black, que resultó ser un gran corredor y en cuyo CV figuran las más  importantes carreras intergeneracionales del turf nipón: Japan Cup G1, Tenno Sho G1 y Arima Kinen G1.

- Kitasan Black fue Caballo del Año en Japón en 2016 y2017 y en la yeguada ha escrito también su nombre en los anales de las carreras como padre del espléndido Equinox, otro castaño oscuro casi negro como Auguste Rodin (capa que heredan del patriarca Sunday S.) que ha sido el mejor caballo de carreras del mundo en 2023. El careto de Silk Racing protagonizó en noviembre un espectacular triunfo en la última edición de la Japan Cup, desempeño que supuso su despedida de la competición y la rúbrica a un historial de 8 victorias sobre 10 salidas a la pista. Este año empieza a cubrir en la Shadai Stallion Station al precio de 20 millones de yenes (unos 126.000 euros), cifra record para un semental novato en Japón. Su padre es también semental en el depósito de Shadai, donde hacen la monta un total de 33 reproductores, entre ellos lis ilustres Lord Kanaloa, Kizuna y Contrail, por citar algunos. La línea femenina de Equinox llegó a Japón en los años 80 con la importación de Blanche Reine. Ganadora de una carrera, este yegua criada por Roland de Chamburé y Alec Head portaba un origen selecto, pues era hija de Nureyev y Belga, esta última madre de 7 ganadores, entre ellos los buenos Bellypha y Bellman, ambos ganadores de grupo. El origen de Equinox está muy bien construido pues presenta inbreedings sobre Halo (4 x 4) a través de un hijo, el citado Sunday Silence, y una hija, la gran corredora estadounidense Goodbye Halo; y sobre Lyphard (5 x 5 x 4) a través de dos hijos, Alzao y el gran Dancing Brave, y una hija, Tizly.

- La imponente línea masculina de Sunday Silence obtuvo otro éxito notable en Japón cuando Do Deuce (Heart’s Cry) ganó hace unas semanas el Arima Kinen G1 y uno más en Europa, algo menos vistoso que los anteriores, pero de obligada reseña en un blog que se titula Desde Dormello: el pasado 11 de noviembre se disputó en el milanés hipódromo de San Siro el Premio Federico Tesio G3, y el ganador fue el 4 años Tempesti, repitiendo el triunfo que había conseguido el pasado año en la misma prueba (entonces G2) y consagrándose así como el mejor caballo italiano de su generación. Tempesti defiende los históricos colores blancos con cruz de San Andrés y gorra roja del propio Federico Tesio pues corre a nombre de la Razza Dormello-Olgiata, la cuadra que el gran criador italiano fundó en los años 30 con el marqués Mario Incisa della Rocchetta  y que aún se mantiene activa. Tempesti es hijo de Albert Dock, un hijo de Deep Impact que ganó dos carreras de G3 en su país pero no generó interés como semental en un mercado en el que hay vástagos de su padre en particular y de su línea masculina en general con mucho mejor valor. Así que el caballo fue exportado a Italia, donde hizo sus primeras montas en 2019 y, aunque en principio no despertó mucho interés, -cubrió 45 yeguas en el conjunto de sus tres primeras temporadas de monta- ha logrado muy buenos resultados y se ha clasificado tercero en la estadística italiana de sementales de 2023 por detrás de los extranjeros Gleneagles y Sioux Nation. Albert Dock hace la monta en el Allevamento di Besnate al precio de 6.000 euros.

Albert Dock (Foto cedida por Allevamento di Besnate)

- El triunfo de Tempesti, al que algunos medios consideran el mejor caballo italiano de 2023, tiene aún más significación porque el caballo desciende por línea femenina de una yegua nacida en 1908 llamada Coronation. Tesio, como Lehndorff, peregrinaba anualmente a las ventas de Tattersalls en Newmarket para reforzar y renovar su plantel de madres y en las segundas ventas de primavera de 1911 pudo hacerse con esta potranca de 3 años por el módico precio de 1.650 guineas. Es cierto que Coronation no había ganado en sus cinco carreras a 2 años y no se había colocado en las 1.000 Guineas, única carrera que había corrido esa temporada, pero llama la atención que Tesio pudiera comprarla barata si tenemos en cuenta lo imperial de su origen: su padre, Isinglass, había ganado la Triple Corona inglesa, y su madre, Sceptre, una de las diosas de la historia del turf, era ganadora de cuatro de las cinco clásicas: 1.000 Guineas, 2.000 Guineas, Oaks y St.Leger.; es decir, todas menos el Derby, donde fue cuarta. Coronation corrió en Italia sin éxito pero fundó para Tesio una buena línea femenina entre cuyos miembros destacan Torbido y Tissot, ambos ganadores del Gran Premio d’Italia, entre otras muchas buenas carreras. Once generaciones de yeguas unen a Tempesti con Coronation, a cuya línea femenina pertenece también, por cierto, Tamanar, un hijo de Sunny Boy que en 1958 ganó para Ramón Beamonte el Prix du Jockey Club, derby francés, y que acabó sus días como semental en Japón. Tempesti fue montado en el Federico Tesio por Christian Demuro, que semanas antes había llevado a Ace Impact a la victoria en el Arco.

- El meeting de la Breeders Cup que vio ganar a Big Evs y a Auguste Rodin supuso un gran éxito, y la cuminación de una excelente temporada, para el alazán Justify, imbatido ganador de la Triple Corona USA en 1918 y semental en el Ashford Stud, la sede estadounidense de Coolmore. Durante el selecto fin de semana de carreras en Santa Anita su hija Just FYI ganó la Breeders’ Cup Juvenile Fillies G1, y su medio hermana paterna Hard to Justify se apuntó la Breeders’ Cup Juvenile Fillies Turf G1. Esta última es un producto más de la espectacularmente exitosa operación de cría que hace solo unos años creó Leopoldo Fernández Pujals y es hija de Distant Reflex, madre también de Quck Reflex, ganador en 2022 en la Zarzuela. Las dos ganadoras en la Breeders, pertenecen a la segunda potrada de Justify, de la que forman también otros que parecen muy buenos: son City of Troy, brillante ganador del Dewhurst Stakes G1 y mejor 2 años de las Islas Británicas; Opera Singer, ganadora del Prix Marcel Boussac G1, y Ramatuelle, también criada por Centurión, ganadora del Prix Robert Papin G2. (City of Troy es otro muy buen nieto materno de Galileo). En la primera potrada de Justify, clásica en 2023, ha habido dos ganadores de G1, así que, entre unas y cosas y otras, este bonito alazán careto se ha convertido en uno de los sementales más cotizados del mundo y su tarifa ha pasado de los 100.000 dólares que costaba en 2023 a costar el doble, 200.000, solo por detrás en el mercado USA de los muy consagrados Into Mischief y Curlin, y de otra de las nuevas estrellas, Gun Runner. Un atractivo añadido de Justify es que parece capaz de engendrar ganadores de primer nivel a ambos lados del Atlántico, una virtud que -con la excepción de Giant’s Causeway, padre de Shamardal- hace mucho que no se observa en los mejores sementales yanquis; véanse los tres citados anteriormente o Tapit o A.P. Indy, por citar animales muy importantes.

- Dos caballos que sí tuvieron esa capacidad fueron el jefe de raza Mr. Prospector y el gran corredor y semental Nijinsky, último ganador, en 1970, de la Tiple Corona inglesa; ambos aparecen repetidos en el pedigree de Justify, el primero, 5 x 3 x 4 a través, curiosamente, de tres hijas, y el segundo 4 x 5 mediante una hija y un hijo. Es curioso reseñar que dos de las hijas de Mr. P. que aparecen en el pedigree de de Justify, Yarn y Preach, son propias hermanas criadas en la histórica Claiborne Farm. Su madre, Narrate, desciende -como la citada Wind in her Hair- de Feola, yegua base de la operación de cría de la reina Isabel II de Inglaterra. Justify es hijo de Scat Daddy, un descendiente por línea masculina del gran semental estadounidense Storm Cat que demostró ser un gran reproductor pero que lamentablemente murió con solo 11 de años de edad. En Europa su principal valedor ha sido el muy buen 2 años y muy prolífico padre de ganadores juveniles No Nay Never, que ha contado con un gran apoyo de Coolmore, donde hacen la monta él mismo y una pléyade de sus descendientes por línea masculina: Ten Sovereigns, Sious Nations, Little Black Bear y Blackbeard. En España hemos visto ganar a Mexico City, Première Rapshody y Marcolini, por No Nay Never, y al 2 años Gimme Love, por Ten Sovereigns.

- Gimme Love, hijo de la ganadora Spanish Aria (Lope de Vega)  y adquirido por 37.000 euros en las ventas de yearlings de Goffs por su entrenador, Guillermo Arizkorreta, es uno de los 2 años que en otoño han mostrado posibilidades de cara a la temporada clásica. Otra es su compañera de patio Leivinha, comprada asimismo por Arizkorreta en la misma casa de subastas y siendo también yearling; costó 9.000 euros, es hija de Make Believe, ganador de la Poule d’Essai des Poulains e hijo de Makfi, este por el gran Dubawi, y tiene en su origen, como Justify, dos líneas de Nijinsky a través de hijo e hija. Y, finalmente, se puede destacar a Reves de  Stars, ganador del tradicional Premio Veil Picard, y a Zinayak, ganador con muy buen remate en su única salida  a la pista; estos dos potros tienen sendas líneas de Allegretta en sus pedigrees. Reves de Stars, que pertenece a la misma línea femenina que Almanzor, el campeón de Antonio Caro, es hijo de Cloth of Stars, este por Sea The Stars, hijo a su vez de Urban Sea, la ganadora del Arco hija de nuestra protaoinista; este castaño fue adquirido en Arqana por la agencia Outsider Bloodstock al precio de 26.000 euros. Zinayak es por Zarak (el hijo de Dubawi y la campeona Zarkava que tan buen resultado está dando como semental) y tiene como abuelo materno, al igual que Ace Impact, a Anabaa Blue, nieto de Allegretta. Fue comprado igualmente en Arqana cuando tenía un año por 26.000 euros por Capucines Bloodstock.

- Georg von Lenhdorff murió el 30 de abril de 1914 en Berlín, a los 81 años de edad. Dos meses más tarde, el 28 de junio, se disputó el Deutsches Derby de aquel año y lo ganó Ariel, un pupilo del Gestüt Schlenderhan hijo de Ard Patrick e Ibidem, la nieta de Alveole que ocho años antes había ganado el Preis der Diana para el banquero Von Bleichröder y de la que desciende Allegretta. Ariel fue montado aquel día por George Archibald, que cinco años más tarde estaba en La Castellana conduciendo a Nouvel An a la victoria en la primera edición del Gran Premio de Madrid.