domingo, 7 de enero de 2018

LA SAGA WERTHEIMER, GREEN VALLEY Y OREGÓN, LYPHARD Y KITASAN BLACK

·En 1910, el joven empresario francés de la cosmética Pierre Wertheimer daba de alta los colores de su cuadra de carreras: chaquetilla azul con costuras blancas, mangas y gorra blancas. Más de cien años más tarde, la cuadra y operación de cría de la familia Wertheimer tiene escrito, y lo enriquece cada día, uno de los capítulos más brillantes de la historia mundial de las carreras: lo protagonizan desde Epinard hasta Goldikova, pasando por Ivanjica; desde Vimy y Lavandin hasta Intello, con parada en Gold River, en Val de L’Orne, y en tantos otros ejemplares de gran clase. En aquel mismo de año 1910, Sevilla cumplía los cincuenta años de actividad turfística; las carreras se iniciaron allí, concretamente en el paraje denominado Dehesa de Tablada, en 1860. En los últimos días, la pista de Dos Hermanas ha visto pasar por ganadores a varios ejemplares en los que la influencia de caballos que defendieron la casaca blanquiazul es bien notoria. 

·En 1968, y concretamente en el mes de febrero, se disputó en Pineda -que en 1941 había tomado el relevo de Tablada con escenario de las carreras hispalenses-, el primer Gran Premio de Sevilla y lo ganó Faraón, de Villapadierna, montado por Román Martín. En noviembre de ese mismo año, se celebró en Deauville la venta de dispersión del ganado PSI de Gertie Douglas, que había mantenido en activo con mucho éxito la cuadra de carreras de su marido, el propietario y criador estadounidense Peter Widener. En ese venta, el agente Robert Giraudon compró por 410.000 francos para Jacques Wertheimer –hijo de Pierre, que había fallecido tres años antes- una yearling hija del clásico Val de Loir, ganador del Prix de Jockey Club en1962, y de la rápida Sly Pola, vencedora en el Robert Papin y en el Abbaye de Longchamp.

·La yegua, a la que se impuso el nombre de Green Valley, no llegó a correr, pero se convirtió en una de las reproductoras básicas de la historia de la cría Wertheimer. Es curioso reseñar que entre su numerosa progenie figura Grunewald, un poderoso castaño hijo del gran semental estadounidense Turn To al que en los 70 vimos correr en España, sin gran distinción, con los colores de la Cuadra Valencia. Muchos más distinguido resultó su medio hermano Green Dancer (Nijinsky), ganador de la Poule  d’Essai des Poulains y del Pirx Lupin, ambas de G1, y muy buen semental. Green Valley dio también a varios útiles corredores y a una pléyade de yeguas que han propagado con mucho éxito su linaje.

·Entre ellas está Vallée Dansante, una ganadora hija de Lyphard que, cruzada a su vez con el ganador del Derby Shirley Heights, dio a Brooklyn’s Dance, una buena corredora que se apuntó el Prix Cleopatre G3; espléndida yegua madre que engendró a doce ganadores de otros tantos corredores, en 2007, con 19 años, fue cubierta por Poliglote, asimsimo producto de los Wertheimer, ganador del G1 y colocado del Jockey Club, pero que ya contaba 16 años de edad. El cruce de estos dos veteranos dio a Solemia, que, entrenada por Carlos Laffon y montada genialmente por Olivier Peslier, corrió como en su vida en el Arco de 2012 para batir en los últimos trancos al japonés Orfevre y ganar la carrera por medio cuerpo.

·Doce años antes que Solemia, Brooklyn’s Dance había dado a Brooklyn’s Storm, hija del gran semental estadounidense Storm Cat y ganadora de dos carreras, una en Francia y otra en Estados Unidos. Del cruce de esta con Smart Strike, asimismo notable padrillo en Estados Unidos, nació Brooklyn’s Smart, ganador de una carrera y con el que hemos llegado al final de este primer viaje por el territorio Wertheimer, pues este caballo fue importado a España como semental por la Yeguada Cortiñal. Solo ha puesto en pista cuatro productos, y tres de ellos no ganaron, pero el restante es el muy servicial Oregón, que el otro día obtuvo en Dos Hermanas su victoria número 11 de 41 salidas a la pista, en las que ha conseguido además 24 colocaciones.

Oregón, en La Zarzuela (Foto: Rafael Lorente).

·El castaño oscuro que entrena Rodríguez es hijo de la francesa Lunakarada, no corredora hija de Akarad, ganador para el Aga Khan del Prix de Jockey Club G1 de 1981, y de la yegua Luna Caerla, que tiene a su vez una importante conexión con nuestras carreras pues es la segunda madre de Celtic Rock, excelente corredor para Eduardo Fierro y hoy semental en la yeguada Dehesa de Cantogordo. Lunakarada ha resultado ser una yegua de vientre más que rentable para Cortiñal, pues de sus seis productos en pista, cinco con ganadores y entre ellos se cuentan los asimismo útiles Xamuray y Osado.  Luna Caerla es madre también de Luna Ridge (Indian Ridge), ganador en Francia y España, segundo de la Mijas Cup de 2003 que ganó Hathaal y semental en Cortiñal, donde dio ganadores como Barocco y Orlov.

·El sevillano Carlos Laffon entrenó también para los Wertheimer a Spartakiste, que no hace honor a su muy aristocrática genealogía –es hijo de Dansili, uno de los mejores sementales de Europa, y de Occupandiste, excelente velocista que ganó dos G1 para la chaquetilla azul y blanca- pero que contribuyó al triplete navideño de Jesús López en Dos Hermanas, donde el caballo había conseguido su única victoria anterior. López ganó también ese día con el nacional Forbaifor, criado en Haras de Marmaria y.. tercer producto ganador de la robusta careta Golden World, ganadora dos veces: una en el hipódromo sevillano y otra en Lasarte, donde José Luis Martínez le hizo aquel día una monta brillante. La yegua, de la que hemos visto también a la útil Golden Dinasty, nos mantiene en territorio Wertheimer: desciende por línea femenina de Gold River, ganadora del Arco para la cuadra en 1981 y madre entre otros productos de Rivière D’Or, por Lyphard. Esta yegua, ganadora a su vez de G1, es la tercera madre de Golden W. y la bisabuela de la sensacional Goldikova, ganadora de 17 carreras, 15 de ellas de G1; excelsa millera, puede ser considerada, con el permiso del legendario Epinard, como el mejor PSI que ha defendido nunca la chaquetilla que en 1910 dio de alta Pierre Wertheimer.

·Parte de la culpa la tuvo un testículo, o al menos eso pensaba el preparador del potro, Alec Head; un testículo que no había descendido y que causó dolor a Lyphard al doblar Tattenham Corner en la disputa del Derby de 1972. El potro negoció fatal el tramo y después se limitó a flotar por la recta final de Epsom con Freddy Head (hijo de Alec) a las riendas mientras Lester Piggott le hacía a Roberto la desde entonces legendaria monta que llevó a la victoria por corta cabeza al pupilo de Vincent O’Brien.

·Testículo molesto o no, del caso es que seguramente Lyphard encontró la milla y media del Derby larga para sus mejores aptitudes, que brillaron en sus victorias sobre los más breves metrajes de los premios Jacques Le Marois G1, De la Fôret G1 y Daru G2. Este hijo y calco físico de Northern Dancer había sido criado en Estados Unidos por Mrs. O.J. Burgwin. Fue vendido como foal por 35.000 dólares al gran criador irlandés Tim Rogers, que al año siguiente lo presentó a las subastas de yearlings de Newmarket, donde Alec Head lo compró por 15.000 guineas para Germaine, la viuda de Pierre Wertheimer. Después de su apreciable carrera en las pistas, Lyphard, otro ilustre blanc et bleu,  se convirtió en  uno de los mejores sementales del mundo en el último cuatro del siglo XX. Entre su progenie, Pharly, ganador del Lupin, el Moulin y el De la Fôret, las tres de G1, y el mejor corredor que tuvo Antonio Blasco, fundador de la Cuadra Rosales.

·Encontramos el nombre de Lyphard dos veces (5 x 5 a través de hijas) en el pedigree de Forbaifor, y otras tantas (5 x 5, a través de hijo e hija), en el de El Puntal , el potro criado por Hispánica que confirmó su buen debut en La Zarzuela con una prometedora victoria en Pau. El alazán de Remolina es producto de un muy bonito cruce, pues en las primeras generaciones de su pedigree encontramos también combinados a los ilustres propios hermanos Kris y Diesis. El Puntal es hijo de Doctor Dino, un  animal que, como Pharly, defendió con éxito en los grandes escenarios  del turf internacional los colores de un propietario español, en su caso Javier Salméan. El caballo hace la monta en el francés Haras de Mesnil y este año ha visto aumentada su tarifa de cubrición desde de los 4.500 a los 8.000 euros merced a los muy buenos resultados de sus hijos en pruebas de obstáculos. Aquí han destacado tres hijas suyas: Musique Sacrée, Virimoon y Arrigunaga. La madre de El Puntal es la útil nacional Pedreña, por Dyhim Diamond, vencedora en tres carreras y madre de otra ganadora, Cibeles (Caradak). Ela y El Puntal dos son por ahora sus únicos productos en pista.

·Otro que tiene dos veces a Lyphard en su origen (5 x 5 mediante hijo e hija) es el espléndido corredor japonés e ídolo local Kitasan Black, que enloqueció a la afición nipona con su rotunda victoria de punta a punta en los 2.500 metros del Arima Kinen G1, que forma con el Takarazuka Kinen G1, que se disputa en primavera, la pareja de singulares pruebas en las que la mayoría de los participantes son elegidos por los aficionados mediante votación. Kitasan B. es hijo de Black Tide, un propio hermano más modesto del gran corredor y semental japonés Deep Impact.  El Arima Kinen se corrió por primera vez en 1956, el año en que Lavandin ganó el Derby para Pierre Wertheimer, montado por el australiano Rae Johnstone y entrenado por Alec Head. Lavandin acabó sus días, por cierto, como semental en Japón.

·Jorge Rodríguez enlazó en Dos Hermanas el triunfo de Oregón con el de otro nacional apreciable, Delfmar, criado por la Cuadra Colisa. El caballo tiene un cruce interesante, pues en sus cinco primeras generaciones se repiten los nombres de Northern Dancer, Nijinsky y Mr. Prospector. Delfmar desciende por línea masculina de Green Dancer, el primer y excelente hijo de Green Valley, y aparte de los citados, tiene un inbreeding 5 x 4 sobre el gran semental Riverman a través de un hijo y una hija.  Este caballo, criado en Estados Unidos por Harry F. Guggenheim, fue adquirido como foal por Alec Head en la venta de dispersión de los caballos del criador americano. Head pagó 41.000 dólares y el potro recompensó su confianza ganando la Poule d’Essai des Poulains, el Prix Jean Prat y el Prix de Ispahan, y siendo segundo de Brigadier Gerard en el Champion Stakes, todas ellas carreras de G1. Riverman corrió con los colores de Germaine, la viuda de Pierre Wertheimer; otro campeón de la interminable saga blanquiazul.

2 comentarios:

  1. Maravilloso regalo de Reyes.Gracias mil.Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  2. Gracias a usted por su amabilidad, Alberto. Ya que cita a los Reyes Magos, podemos decir que uno de los buenos hijos de su campeón Epinard que crió Pierre Wertheimer se llamaba Balthazar. Nacido en 1937, fue un buen millero que ganó nueve carreras, entre ellas algunas hoy calificadas de grupo, como el Prix de la Jonchère (ahora Paul de Moussac) o el Prix Quincey. Saludos

    ResponderEliminar